Mariana Aylwin:
nos falta solidaridad, ponernos en el lugar del otro
Presidenta comisión educación "Todos al aula", Ex ministra y ex diputada Mariana Aylwin:
“Nos falta solidaridad, ponernos en el lugar del otro”
“Nuestra sociedad está llena de prejuicios y cada vez más, se ha ido instalando una suerte de superioridad moral que condena a la hoguera cualquier situación controvertida en la vida, aunque se haya superado”. Así de tajante es la respuesta de la ex ministra y ex diputada Mariana Aylwin, además hija del fallecido Presidente Patricio Aylwin, al analizar la falta de oportunidades para personas como las que acompañamos en Corporación Mañana.
P: ¿Cómo cree que podemos vencer este miedo a incorporar a las personas con el perfil que atendemos en nuestra Corporación? ¿Cómo vencer ese prejuicio y percepción de amenaza?
Es miedo a la diferencia, a lo que se sale de lo fácil. Hay que combatirla mostrando el valor y la dignidad de toda persona, y en estos casos las historias de esfuerzo.
P: ¿Hemos avanzado en el camino de la integración o inclusión como sociedad? ¿Qué nos falta como país, como sociedad?
Hemos avanzado, sobre todo las generaciones más jóvenes. Pero falta muchísimo camino por andar. Nos falta SOLIDARIDAD, ponernos en el lugar del otro, detenernos en el camino a mirar la realidad en su complejidad, respetar a todas las personas.
P: Generalmente, el abuso de alcohol y drogas, especialmente a temprana edad, va de la mano del abandono y la reiteración de conductas aprendidas en el seno de una familia disfuncional, violenta y carenciada. Por lo tanto ¿llegar a este núcleo para atraer a los menores con nuevas visiones y oportunidades podría contribuir a romper esta cadena?
El trabajo con la familia es fundamental. Cuando no hay una familia de apoyo, hay que buscar adultos que acompañen.
P: ¿Cuál es su opinión de la labor que desarrollan organizaciones como Corporación Mañana? ¿Qué nos recomendaría en este camino para apoyar a los hombres que anhelan retomar sus vidas con nuevas oportunidades, esperanzados y con nuevas herramientas?
Sólo me atrevo a recomendar trabajar más visiblemente, campañas comunicacionales que golpeen la conciencia y meterse en los programas y políticas educativas.
P: Sería interesante crear una coordinación con la empresa privada para que quienes se han rehabilitado tengan acceso cupos laborales, oportunidades para demostrar sus capacidades ¿cree factible esto en nuestro país?
La alianza pública-privada es la única manera de que las políticas públicas mejoren en calidad. El Estado no tiene los recursos. Por eso, convocar a un esfuerzo de todos, es lo que tiene posibilidades de mayor éxito.
P: Desde su experiencia ¿los chilenos somos solidarios y conscientes de la importancia social que tiene apoyar y abrir puertas a quienes tienen menos posibilidades?
Somos solidarios en las catástrofes, no en el día a día. Pero, en los sectores de mayores carencias hay más solidaridad, se comparte más, y también hay más empatía, la gente se ayuda… pero, vamos contra la corriente.
P: ¿Qué terminó prefiere usar: inclusión o integración? ¿Por qué?
No sé por qué se terminó con el término integración. Supongo que inclusión tiene un sello mayor de respeto a la diferencia, mientras que con integración se considera que las personas se integran a la mayoría, renunciando a la diferencia.